Un artículo de opinión, también llamado de fondo o editorial es el artículo escrito por el redactor jefe, o columnista y es la pieza periodística en la que se interpretan los hechos más importantes del día. Por esta razón, a menudo se encuentra en la mejor posición, en la primera página.
Historia del artículo de opinión
El artículo de opinión no siempre está en la primera página, muy a menudo puede estar en la tercera. Más allá del cargo, su relevancia está fuera de toda duda. Incluso cuando no encontramos la firma del director, sabemos que allí se concentra la opinión básica del periódico, que a veces queda en manos y palabras de otros periodistas o columnistas. El fondo traza la línea editorial, dando espacio sobre todo a la actualidad y a la política filtrada por la perspectiva de la revista.
Pero, ¿Dónde se originó este tipo de pieza periodística? En Inglaterra, donde tomó el nombre de artículo principal. Los primeros en escribirlas fueron Daniel Defoe y Jonathan Swift. El periódico fundado por Defoe, el Weekly Review, solía publicar un artículo que resumía la interpretación de los acontecimientos del día en un análisis crítico. Aunque llevaba su firma, no pretendía ser una expresión única de su pensamiento. Así se inició una tradición que el periodismo anglosajón recogió y cultivó con el tiempo.
Con el tipo de organización empresarial que adoptaron los periódicos ingleses en torno al siglo XVIII, ya no era posible controlar a todos los periodistas y cribar todas las piezas. El editor no tuvo más remedio que rodearse de plumas eminentes, que a su juicio estaban suficientemente preparadas para escribir el artículo principal. A partir de ese momento, la primera página ya no era exclusiva del director, sino que también daba espacio a otros periodistas.
En España, todavía en el siglo XVIII, el artículo más importante que se concedía a la portada era el de la solapa. Aparecía en la última columna de la primera página y continuaba en la segunda, una tradición que sigue viva en algunos periódicos. Sin embargo, poco a poco los temas tratados cambiaron, ya no sólo la política sino también la cultura, la economía y la sociedad. A menudo se sustituía la posición en la última columna para dar al artículo del fondo la primera columna.
Cómo escribir un artículo de opinión
El editorial, como hemos visto, ya no es una pieza que sólo puede escribir el editor. Por el contrario, para dar un aliento más plural a la información, es ya una costumbre consolidada confiarla a pensadores ilustres, no necesariamente periodistas. Presenta la opinión del periódico y, en algunos casos, está pensado para que los lectores del periódico se adhieran al pensamiento expuesto. Sin embargo, la opinión siempre está respaldada por las noticias. ¿Cuáles son los pasos a seguir para escribir un editorial de forma correcta y convincente?
Para influir en los pensamientos de los demás, no basta con la inspiración, sino que se necesita una estructura precisa. Primero se elige el tipo de editorial:
- Explicación: El primero tiene un formato adecuado para explicar por qué el documento adopta una posición determinada.
- Crítica: El artículo de fondo crítico trata de ofrecer un análisis crítico contrario a las decisiones o acciones tomadas por otros, sugiriendo normalmente otras soluciones
- De la persuasión: El fondo de persuasión es un tipo de pieza periodística orientada a empujar al lector a la acción y no sólo a proponer soluciones abstractas.
- Exhortación: Finalmente, el último tipo se utiliza para dar apoyo a personas, asociaciones, segmentos de la sociedad u otros que han actuado positivamente según el periódico.
El editorial en el periodismo: sencillo y preciso
No estamos hablando de literatura, poesía, arte o cualquier otro campo en el que se trate la palabra escrita con otros fines. Se trata de informar. Así que evita el giro. Tienes que presentar opiniones respaldadas por hechos, así que asegúrate de que las cuentas que tienes son veraces y comprobables. En la era de la información a través de Internet, los periódicos son un bastión de salvaguarda para el periodismo, manténgase fiel a este valor de veracidad.
Una característica que debe poseer absolutamente una editorial es el llamado foco. Es decir, la parte en la que se expone una observación original, que la hace única. Sólo analizando diferentes fuentes es posible formular un nuevo pensamiento, basado en lo que ya se ha analizado sobre el tema.
Todos estos pasos deben organizarse en una lista establecida para escribir un artículo claro, sin digresiones innecesarias ni grandes palabras complicadas. Su objetivo es hacer que usted lea y que no abandone la lectura después de diez minutos. La lectura debe ser rápida y apremiante, así que privilegia:
- Frases cortas
- Buena puntuación
- Vocabulario accesible
La jerga no se recomienda en absoluto, a menos que sea útil para explicar su origen con el fin de apoyar su posición. Las repeticiones también deben evitarse como la peste, alargan el caldo y no aportan nada sabroso. Así que una frase explicativa, impresionante y clara, no necesita ser explicada con otras frases, con una sola es suficiente.
El número de pulsaciones suele oscilar entre 600 y 800 palabras, la longitud es importante y siempre lo será a la hora de leer los periódicos. Cada vez tenemos menos tiempo y ganas de pasar horas leyendo, sobre todo los periódicos donde los artículos están escritos en letra pequeña, con caracteres difíciles de descifrar.
Artículo de opinión: exponga su tesis
Ejemplo de artículo de fondo. Al igual que una tesina de licenciatura, el artículo de fondo también incluye la tesis, un pensamiento único que se genera a partir de la reflexión. Para empezar, tendrás que escribir una introducción, seguida de uno o dos párrafos. No se extienda demasiado en este punto del documento. El íncipit en sí debe ser corto y que invite a la reflexión, puedes probar con:
- Una cita
- una pregunta
- Una afirmación
Sí, es cierto, estás «contando» tu opinión, pero no escribas en primera persona, a no ser que ya seas muy conocido y seguido como intelectual o líder de opinión, usando la primera persona corres el riesgo de dar al artículo un tono de voz editorial demasiado informal.
Tras la introducción, puede exponer el problema de la forma más objetiva posible. Para ello, responde a las seis preguntas periodísticas:
- Quién
- Qué
- Cuando
- Dónde
- Cómo
- Por qué
De este modo, estarás proporcionando a los lectores la información esencial para que entiendan de qué estás hablando y tengan ya una idea básica al respecto.
Si está haciendo un editorial crítico, intente poner el argumento contrario en primer lugar, de lo contrario es probable que el lector se confunda. Si no hablas de forma objetiva e incluso positiva sobre el bando contrario puedes dar la impresión de ser demasiado partidista, modera tu punto de vista y el estilo en el que escribes.
Lo que puede hacer en su lugar es citar también referencias literarias. El lector se sentirá transportado por tu escrito y será más convincente. El argumento será claro si expones tus razones junto con las existentes.
Cómo concluir un artículo
La conclusión juega un papel importante. Para terminar con una nota alta, puedes hacer una declaración especialmente impactante que se mantenga. Utiliza las comillas para responder a la pregunta que has formulado en la apertura, o reformúlala de forma ligeramente diferente, insinuando claramente el tipo de respuesta que esperas. Pero más allá de las intuiciones, ofrece propuestas concretas, no te limites a criticar, analizar, profundizar sin ir al fondo y decir cómo aportarías tu contribución práctica a una situación determinada. Una vez que haya escrito todo esto, será el momento de la corrección. Si no tienes un corrector en tu redacción tendrás que hacerlo tú mismo, cuantos menos errores cometas durante el proceso de escritura menos tiempo tendrás que dedicar a la revisión.
De hecho, recuerda que siempre es mejor escuchar la opinión de otra persona para tener una comparación más objetiva de lo que has escrito. Sobre todo si se le ha encomendado la responsabilidad de escribir un editorial que represente el punto de vista de todo el periódico y quiere estar seguro de haber dado en el clavo.